El alma y la musa

El alma y la musa Cuentan que un día un alma vino y presa del asombro, leyó este poema... Carta ajena que en los dedos quema plena de luz, el alma intervino. Viajó allí donde la musa esperaba, cansada de dolor, muerta y angustiada. El alma la vio, y sólo lloraba... Cálida luz de ella emanaba: Alma Oh mi bella musa, ¿a qué se debe a qué. esos ojos que ayer brillaran, hoy del cáliz de Amor, ya no bebe y esas manos que suave acariciaran el sentir de ese calor que usted... ya no siente? Musa Oh ¿eres mi alma?.. No, ya no hay nada.. Sólo trozos y pedazos del ayer... Saber, sólo sé... que no soy mujer, De aquello que tuve, ya fui olvidada del cálido manto, del pleno placer estoy tan vacía, estoy tan cansada... Por favor, vete ahora. Tan sólo déjame pues sólo queda un alma destrozada. Alma ¿Qué me decís, mi señora oh no..no soy vuestra alma. Cuidad, Me envía un ángel del cielo para de un ángel cuidar. Que de Amor muere mi dueño y muere al veros llorar. Deciros que en la luz hay un sueño y lo roto, es realidad. Mas el alma nos lleva allí donde los ojos no ven sino donde lleva la esperanza. Sólo sufren quienes no creen quienes no ven semejanza entre lo vivido, y bien quedó atrás la añoranza quien supiera cómo... quien dejome estas palabras, por vos "Decidle, mi alma, decidle que en la vida no ha de haber tormento, "que ella es el aire, es el respirar que siento" Musa ¡Estoy tan sorprendida! ¿y de quién sois el alma vos? -ella mira en la ventana un cálido cielo azul- Alma Oh, dulce niña adorada, en tu corazón un alma se esconde, encerrada en un baúl mi dueño me dijo así: "responde, mi alma si ella te pregunta quién eres, dile por favor... SOY TÚ" Autor: Guardián del Alma © Derechos reservados